Tratamientos

El Sexólogo y el Tratamiento Sexológico

- ¿Qué es exactamente un Sexólogo?

Un/a Sexólogo/a Clínico/a es un profesional de la salud entrenado para diagnosticar y tratar los trastornos de la sexualidad.

Por lo general es un Médico o un Psicólogo, aunque puede ser un especialista en Educación que se ha formado en Educación Sexual. Cada profesional desempeña su actividad desde el área de su disciplina respectiva y utiliza los recursos y las técnicas propias de su especialidad.

Los Médicos que trabajamos en Medicina Sexual y en Educación Sexual para la Salud y Mejor Calidad de Vida, aportamos a nuestro ejercicio, el saber de la especialidad médica que constituye nuestra profesión. De este modo, el psiquiatra que es también sexólogo tiene un abordaje de la problemática sexológica diferente al Urólogo- Sexólogo y al Ginecólogo-Sexólogo. Todos estamos entrenados en Sexología Clínica y cada uno le agrega el plus de su capacitación en su área respectiva.

- ¿Qué significa "Consulta de Orientación"?

Muchos de los profesionales que trabajamos en el diagnóstico y tratamiento de las Disfunciones Sexuales y en Educación Sexual para la Salud y una mejor Calidad de Vida, ofrecemos una primera consulta de orientación. Durante la misma, el o la persona que consulta, intenta explicar lo mejor que puede qué cosas lo/la preocupan. A veces consulta para poder prepararse para su primera experiencia sexual, otras veces para encontrar una explicación al motivo por el cual el encuentro íntimo no resultó como esperaba. En muchos casos las personas o parejas que concurren, intentan mejorar sus relaciones que por lo displacenteras, ponen en riesgo el buen entendimiento de la pareja y a veces hasta su continuidad. También concurren personas que tienen muy buenos encuentros sexuales pero los quieren mejorar y padres que necesitan informarse mejor para poder dialogar con sus hijos con bases científicas.

A través del diálogo es posible identificar el problema, que no siempre coincide con lo que el paciente manifiesta, ya que en el momento de la consulta, los síntomas que aparecen, pueden ser el resultado presente de una situación que se inició hace tiempo y, la persona que consulta no alcanza a relacionar con el síntoma actual. En esta primera consulta podemos determinar si el origen de la Disfunción Sexual es orgánica, funcional o de orden emocional y programar con el/la consultante los estudios clínicos a solicitar y el plan de tratamiento a seguir.

Pero lo más importante de la consulta de orientación es que, ahuyentado el temor o la vergüenza iniciales, los consultantes reciben una información concreta y precisa, que les permite dar al problema una dimensión justa y tomar la decisión que les parezca más conveniente.

- ¿Cuándo una persona necesita un Tratamiento Sexológico?

Cuando existe cualquier alteración en la función sexual que se produce reiterativamente, en más de la mitad de los encuentros íntimos y se prolonga en el tiempo por lo menos tres meses, significa que existe una causa que no va a desaparecer por sí sola.

Cuando la alteración sexual produce malestar a quien la padece y a su pareja, poniendo en conflicto al vínculo que los une, es el momento de consultar, sobre todo si ya ha pasado el tiempo desde que comenzó el problema.

Cuando una persona padece Diabetes, Hipertensión Arterial, Hipotiroidismo u otra enfermedad sistémica y nota cambios en su sexualidad, cuando se encuentra tomando medicamentos que le ocasionan como efecto secundario Disfunciones Sexuales, cuando se está recuperando de una cirugía o de un accidente que le ha dejado secuelas en la función sexual y/o reproductiva, o un trauma a nivel psíquico.

Cuando una persona padece Aversión Sexual, que es el rechazo hacia todo contacto a nivel físico, o cuando sufre de Fobia, que es el miedo incontrolable a ser dañado/a genitalmente en el transcurso del encuentro sexual.

Cuando la mujer o el varón se encuentran en etapa de climaterio (a veces conocida comúnmente como menopausia), alrededor de los 50 años y sienten que su vida sexual ya no los satisface.

Los enumerados no constituyen la totalidad de los casos que requieren un tratamiento sexológico. Así como se concurre a cualquier otro profesional de la salud, ante una duda, el/la Sexólogo/a Clínico/a es quien realizará un diagnóstico que le permita al consultante saber si un tratamiento es necesario.

- ¿En qué consiste un Tratamiento Sexológico?

Un viejo aforismo dice "no hay enfermedades sino enfermos". Esto mismo es aplicable a la Medicina Sexual. Aunque el motivo de consulta de dos pacientes sea el mismo, la causa primaria del trastorno puede ser muy diferente en cada caso y requerir tratamientos completamente distintos.

Pero lo que todos quieren saber es "qué sucede en las consultas", ya que todavía la curiosidad y el desconocimiento dan lugar a fantasías respecto de lo que sucede en el consultorio del sexólogo o de la sexóloga.

Los medios complementarios de diagnóstico

Quienes somos Médicos Sexólogos utilizamos, en una primera instancia, los recursos y la técnica de la medicina tradicional, a través del diálogo con los pacientes para recabar información (anamnesis), la confección de una historia clínica confidencial y la utilización de los métodos de diagnóstico clínico como análisis de laboratorio, ecografías, etc. Existen estudios como el Rigiscan que permite evaluar las erecciones y los estudios Ecodoppler que identifican las alteraciones vasculares, entre muchos otros recursos de diagnóstico. Ellos son un complemento importante que ayudan a realizar una identificación rápida del problema y a dar un comienzo inmediato al tratamiento.

La interdisciplina

Cuando los resultados de los estudios indican la existencia de una patología sistémica, como Arteriosclerosis, Diabetes, Insuficiencia Renal, Hipotiroidismo, Hipertensión arterial o si la enfermedad es urológica, neurológica o de cualquier otra índole, se recurre a la interconsulta con el especialista que corresponda, para continuar el tratamiento en forma interdisciplinaria, es decir, el especialista tratará la enfermedad de base y el Sexólogo realizará el tratamiento específico del problema que produjo la consulta. En esos casos el/la paciente no necesita relatar al otro profesional sus problemas sexuales.

Cuando la Disfunción Sexual es de origen psicológico, también se utilizan recursos de diagnóstico como los Tests (Roscharch, diagnóstico de Depresión, etc.)

Los recursos del tratamiento

Utilizamos diferentes medicamentos en el tratamiento de las Disfunciones Sexuales, psicofármacos, vitaminas, oligoelementos, etc. además de los fármacos necesarios para las diferentes patologías de base.

También se realizan intervenciones psicoterapéuticas con diferentes técnicas, psicoanálisis, cognitivo-comportamentales, conductuales, sistémicas y también técnicas de Hipnoterapia, Programación Neurolinguística y otras. El/la Sexólogo/a Clínico/a debe determinar qué tratamiento es el más adecuado para cada paciente.

Cuando quienes consultan son parejas, las sesiones se realizan con cada uno de ellos en forma individual y otras en conjunto. Existe un convenio de confidencialidad entre el/la profesional y cada uno de los miembros de la pareja, con el objeto de contribuir al mejor resultado del tratamiento.

Es frecuente que el/la profesional tratante indique a cada componente de la pareja o a los dos juntos, la realización de actividades o "tareas para el hogar".

Estos son ejercicios entretenidos que contribuyen a desarticular las rutinas establecidas por la pareja durante años y al descubrimiento y exploración de actitudes más amorosas y creativas.

- ¿Cuánto tiempo dura un tratamiento?

Por lo general, de cinco a quince consultas como promedio. Se solicita a los pacientes una continuidad de una consulta semanal o quincenal.

- ¿Es costoso?

Al tener las consultas una duración de una hora, con honorarios regulares y un promedio de cinco a quince entrevistas, no constituye un tratamiento costoso.

- ¿Me sentiré incómodo/a en las consultas?

Desde la primera entrevista, un/a profesional entrenado/a sabe como facilitar el diálogo, a través de desarrollar el sentimiento de empatía, ayudar a la verbalización del problema y desdramatizarlo. Además, al brindar la información adecuada y una devolución diagnóstica en la misma entrevista de orientación, permite establecer una corriente de confianza y seguridad que baja la ansiedad propia de este tipo de consulta.

Un tratamiento sexológico nunca es agresivo, ni impone ningún tipo de práctica que pueda avergonzar a los pacientes. Las actividades terapéuticas indicadas se realizan en la intimidad del hogar, únicamente con el consentimiento de los mismos y no implican jamás actos que vulneren el pudor ni el respeto que todo ser humano merece. Un tratamiento sexológico no requiere tampoco de ningún tipo de contacto físico entre pacientes y terapeuta.

- ¿Y si el tratamiento me cambia, si me convierto en otra persona y eso afecta a mi pareja o a mí mismo/a?

Este pensamiento es más frecuente en las personas que sufren de Fobias Sexuales, ya que han estado en un estado de represión y ocultamiento de sus propias emociones durante tanto tiempo, que han desarrollado una segunda naturaleza de características fóbicas y temen el riesgo de salir de la misma situación que los hace sufrir.

El tratamiento en estos casos es progresivo y permite que el/la paciente vaya incorporando nuevos recursos para poder funcionar, del mismo modo que lo hacen las personas que tienen miedo a volar o a los espacios abiertos (agorafobia).

Lo que debe esperarse siempre es una mejor calidad de vida que redundará en beneficio del/la propio/a paciente y de las personas con las cuales se relaciona.

Visite el Artículo: El miedo a la primera consulta.